Fotografia de Antonia Freile
Un
día gris, como el acero templado de las lanzas, como el plomo que descansa en
los casquillos de las balas tras ser disparadas y quizá, como presagio,
apareciera aquella llovizna fina, casi doliente, que se envolvía en la niebla.
Descendimos del auto en bandada,
con las miradas perdidas y la muerte atada a la garganta.
Desnortados por el escalofriante paisaje que nos atrapaba, atónitos, contemplábamos los registros sobre las piedras de un muro infinito. El infinito muro de los caídos, donde los “In Memoriam” sin nombre se volvían números. A los mil trescientos, a los siete mil …
Fotografia de Antonia Freile
Un
panfleto nos hizo de guía mientras que, un hombre, del que jamás logré volver a
dibujar el rostro, nos hablaba de la grandeza de Austria. Aquel día, los campos
de Mauthausen nos abría las puertas del horror de sus barracones, ahora vacios de todo, menos de
memoria. Porque de aquellas estancias mudas, tan desnudas como los millares de
cuerpos mutilados sin por qué, se desprendían los ecos desesperados de los
torturados. Ecos que el tiempo, no podrá callar jamás.
Fotografía de A. Freile
En
uno de los pabellones, la huella atroz
del holocausto, palpable y visible, se vestía con el rojo de la sangre sobre
una mesa de mármol blanco con surco. Una sangradera, como único lecho de muerte. Una muerte lenta, gota a gota, en la
misma medida en que los presos eran desangrados y su sangre, regalada a los
soldados del este.
Recuerdo el denso del aire,
irrespirable. El hurto del vómito. La herida de una barbarie irreparable en
un llanto sofocado bajo las duchas de la cámara de gas y un silencio celeste que
no conoce olvido.
Fotografia de A. Freile
Fotografia de A. Freile
Recuerdo las losas de los difuntos; los niños,
ángeles caídos arañando mis entrañas hasta derrumbarme en lágrimas con el frío
que hiela y te atraviesa….y el amargo
color de los crisantemos y los lirios como una noche eterna.
Ayer, como hoy, es inútil pedir
cordura y humanidad, cuando se “es” en maldad, no se conoce límites.
Un
mes de octubre de un año cualquiera. Un viaje de fin de carrera que había sido
aplazado…. Mauthausen… holocausto.
Dama de Seis
DOCUMENTO:
Dachau, primer campo de
concentración nazi que se creó en 1933 sobre los cimientos de una vieja fábrica
y que sirvió como modelo de los que se crearon después. Fue fuente de las experimentaciones médicas
más crueles e inhumanas. Liberado en Abril del 1945.
Auschwitz,, el mayor campo de
exterminio del tercer Reich. Contaba con tres campos principales, Auschwitz I,
campo general. Auschwitz II, campo de exterminio donde murieron la mayor parte
de las víctimas y donde se ubicaba a las mujeres. y Auschwitz III, campo de trabajo forzado para
la empresa IG Farben. Y 39 subcampos.
Empezó a construirse en 1940 sobre los ladrillos de los barracones de los
soldados polacos. En Junio del mismo año, llegó el primer transporte de
prisiones. Hasta su liberación en Enero de 1945, se había cobrado más 1,1 millones de víctimas. Hombres, mujeres,
niños…
Mauthausen-Gusen, fue un grupo de
campos de concentración nazi, el más grande de Europa. Además de los cuatro
campos principales en Mauthausen y Gusen, contaba con más de 50 subcampos
repartidos por Austria y Alemania. Mauthausen-Gusen,
fueron los dos únicos campos de toda Europa etiquetados como campos de
"Grado III", lo que significaba que eran los campos más duros para
los "Enemigos Políticos” del Reich. A diferencia de otros campos de concentración,
destinados a todo tipo de prisioneros, Mauthausen fue utilizado especialmente
para tareas de exterminio de la "Intelligentzia",
gente ilustrada, así como miembros de la alta sociedad de países sometidos por Alemania durante la Segunda Guerra Mundial.
Creado en el verano de 1940, fue el último en ser liberado en Mayo de 1945. Se
desconoce el número de víctimas, aunque se cifran en más de 122.700 y las
320.000 en todo el complejo.
Dama de seis.
La valentía de afrontar la verdad y no olvidarla es la única prevención para que esas atrocidades no se repitan. Tu testimonio es extraordinario, porque pone al descubierto las raíces de la úlcera: la inteligencia aplicada a la perversión. "Nunca pensé que se llegaría a esto..." (excusa escuchada demasiadas veces en los Juicios de Nüremberg). "Se llegó a esto la primera vez que Vd. condenó a un inocente a sabiendas de que lo era" (veredicto del la Corte Penal Internacional).
ResponderEliminarEstoy completamente de acuerdo contigo, Rafael, afrontar la verdad y no olvidarla es la única prevención para que no se repitan semejantes atrocidades. Pero los fanatismos obsesivos llevan a las malas personas a las acciones más insospechadas e inhumanas. Y lo peor de todo, es que si... existen personas verdaderamente malas con gran poder de manipulación.
EliminarGracias por tus palabras. Abrazos.